Ya advertí en la previa que no sería fácil y no lo fue. Si no que fue muy difícil y lo que es peor creo que muy desgastador para los jugadores del Barça tanto física como mentalmente.
La primera mitad empezó como era de esperar con una presión asfixiante y al límite de los daneses espoleados por su público y así en los primeros minutos se sucedieron jugadas extrañas como un golpe a Puyol (con este no pueden ni a hostias), un tiro a la cruceta de los daneses y una entrada en plan karateca de Valdés. A partir de ahí el Barça cogió el balón y poco a poco comenzó a controlar el partido y a acercarse a la meta de los daneses. No era un dominio claro, pero si teníamos la pelota y el control del partido, el balón pasaba por los pies de Xavi e Iniesta y esto es siempre buena señal. Así llegó el gol de Messi (está que se sale), control rápido y orientado con la zurda para golear con la diestra.
Lo más difícil estaba hecho pensamos todos, pero no, lo difícil era mantener el resultado y no supimos hacerlo por más de un minuto, duro palo para el Barça y demasiada recompensa para el Copenhague. Esto unido a que Villa sigue tirando más al palo que a dentro de la portería propició que a pesar de llevar el peso del partido y merodear por el área rival, se llegase al descanso con el 1-1.
La segunda parte empezó con los daneses más retrasados con una línea de 5 defensas y 4 mediocampistas defendiendo en su propio campo, tejiendo una tela de araña que impidió que Xavi e Iniesta entraran en juego y que las distancias entre los jugadores del Barça fuesen enormes sin poder enlazar ninguna jugada de peligro hasta el último minuto en el que Pedro que había entrado por un apagado Villa, estrelló un balón en el palo de la portería rival. Por aquel entonces ellos habían tenido alguna que otra llegada al área con incluso un gol correctamente anulado por falta de N`Doye.
Lo peor de todo no ha sido el resultado, si no la pobre imagen que dejó el equipo en la segunda mitad, falto de ideas y muy bajo físicamente.
El Copenhague no es candidato a ganar la Champions pero es un buen equipo, física y tácticamente, y el partido de ayer es buena prueba de ello, a pesar de esto el Barça debería haber ganado este partido, dejar la clasificación asegurada y no tener que depender de ganar en Atenas para poder disputar con más tranquilidad el partido de casa ante el Kazán.
Nota: Creo que nos sigue faltando un plan B cuando los equipos se cierran como ayer el Copenhague, el Kazán, el Inter…………. Y quien nos dice que no el Madrid el 28 N. Guardiola debería de encontrar una solución o sufriremos.
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La primera mitad empezó como era de esperar con una presión asfixiante y al límite de los daneses espoleados por su público y así en los primeros minutos se sucedieron jugadas extrañas como un golpe a Puyol (con este no pueden ni a hostias), un tiro a la cruceta de los daneses y una entrada en plan karateca de Valdés. A partir de ahí el Barça cogió el balón y poco a poco comenzó a controlar el partido y a acercarse a la meta de los daneses. No era un dominio claro, pero si teníamos la pelota y el control del partido, el balón pasaba por los pies de Xavi e Iniesta y esto es siempre buena señal. Así llegó el gol de Messi (está que se sale), control rápido y orientado con la zurda para golear con la diestra.
Lo más difícil estaba hecho pensamos todos, pero no, lo difícil era mantener el resultado y no supimos hacerlo por más de un minuto, duro palo para el Barça y demasiada recompensa para el Copenhague. Esto unido a que Villa sigue tirando más al palo que a dentro de la portería propició que a pesar de llevar el peso del partido y merodear por el área rival, se llegase al descanso con el 1-1.
La segunda parte empezó con los daneses más retrasados con una línea de 5 defensas y 4 mediocampistas defendiendo en su propio campo, tejiendo una tela de araña que impidió que Xavi e Iniesta entraran en juego y que las distancias entre los jugadores del Barça fuesen enormes sin poder enlazar ninguna jugada de peligro hasta el último minuto en el que Pedro que había entrado por un apagado Villa, estrelló un balón en el palo de la portería rival. Por aquel entonces ellos habían tenido alguna que otra llegada al área con incluso un gol correctamente anulado por falta de N`Doye.
Lo peor de todo no ha sido el resultado, si no la pobre imagen que dejó el equipo en la segunda mitad, falto de ideas y muy bajo físicamente.
El Copenhague no es candidato a ganar la Champions pero es un buen equipo, física y tácticamente, y el partido de ayer es buena prueba de ello, a pesar de esto el Barça debería haber ganado este partido, dejar la clasificación asegurada y no tener que depender de ganar en Atenas para poder disputar con más tranquilidad el partido de casa ante el Kazán.
Nota: Creo que nos sigue faltando un plan B cuando los equipos se cierran como ayer el Copenhague, el Kazán, el Inter…………. Y quien nos dice que no el Madrid el 28 N. Guardiola debería de encontrar una solución o sufriremos.
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