Espanyol 0 - Barça 2 (26-05-2013)


0-2: El Barça gana el derbi y queda a tres puntos del récord

El Barça se lleva un derbi con poco fútbol con un tanto del chileno y otro de Pedro en que Wakaso acabó expulsado tras un nuevo 'cruce de cables'

El cuadro de Tito está a solo tres puntos de sumar los 100 que tienen por objetivo en la Liga

Villa vive otro partido de pesadilla y Vilanova le acaba sustituyendo por Pedro

El Barça no pierde en el campo del Espanyol desde la temporada 2006-07. Está viviendo una época de claro dominio en los duelos en el campo del conjunto blanquiazul. Espanyol y Barça disputaron una primera parte impropia de un derbi que tiene más de un siglo de antigüedad. Ni se llenó el estadio, ni hubo un ambiente propio de este tipo de partidos. Darle la espalda al Barça, después de que los jugadores blanquiazules les hicieran el pasillo a los blaugrana, fue el único momento de cierta tensión emocional. Los espectadores no pasaron de los 27.578 valientes que acudieron a presenciar in situ el derbi.

Quienes presenciaron la final de la Champions entre el Borussia de Dortmund y el Bayern seguro que el derbi les supo a muy poco por el escaso fútbol que ofrecieron espanyolistas y barcelonistas. No hay duda de que ni la vieja rivalidad sirve cuando no hay nada serio en juego. El espanyol se despidió de Europa y el record de los 100 puntos tampoco es una cosa que les quite el sueño a los barcelonistas. Con todo, los hombres de Tito jugaron un partido serio, ejercieron un dominio sobre el balón, presionaron bien y fueron prácticos. Con la victoria les bastaba y a eso fueron, sin ‘virguerías’.

El Espanyol salió a morder arriba y fueron los únicos momentos en que mandó sobre el campo. Esperaba en marcajes individuales a los barcelonistas que sacaban el balón para arrebatárselo o propiciar el fallo en el pase y salir al contrataque. Sólo sacaron botín con su táctica en un tremendo error de Gerard Piqué que obligó a Víctor Valdés a despejar apuradamente de cabeza.

Golazo de Alexis

El partido quedó rotó gracias a un gol de Alexis que sí, en esa jugada hizo buenas sus palabras en Chile de que “soy un jugadorazo”. Salió de la izquierda, hizo una ‘pared’ con Villa, controló el balón con el pecho, se deshizo de dos defensas con un quiebro y batió a Cristian Álvarez. Fue un golpe para los blanquiazules.

Encima esta vez, el Barça presionó muy bien, arriba, sin dejar espacio a los hombres del ‘Vasco’ Aguirre y se encontró con terreno para evolucionar. Aunque lo hizo al ‘tran tran’, pecó de falta de velocidad en la mayoría de ocasiones. Pero le bastó.

Cesc pudo ampliar el marcador pero su remate se estrelló en el poste, tras aprovechar un centro de Alex Song, llegando desde la segunda línea. No fue gol de milagro (43’). Por parte espanyolista sólo hubo un remate con intención de Colotto que Valdés atajó sin mayores problemas. Aunque Andrés Iniesta replicó con un tirazo parecido, con más efecto, que pasó rozando el poste. Poco botín ofensivo de uno y otro equipo.

Derbi particular

Los únicos que si vivieron el derbi barcelonés con intensidad fueron Wakaso y Alves, dos jugadores de carácter que lo pusieron todo en cada jugada, que metieron el pie, que fueron al choque. Además, los dos que se marcaban mútuamente, intentaron en todo momento atacar y dar balones a sus puntas.

En la segunda mitad todo siguió igual. Ni Aguirre ni Vilanova hicieron cambios. Mantuvieron los mismos ‘onces’ en el que por parte blaugrana faltaban, dos grandes referentes como Messi y Xavi. A algunos les sorprendió que, otra vez, Tito no echara mano de Bartra y le diera minutos. No hay duda de que este mensaje continuado es de falta de confianza en el canterano.

En esos minutos, Thiago y Cesc crearon una jugada al primer toque para dejar a Villa en disposición de marcar. David se deshizo de sus marcadores, pero cuando ya los barcelonistas cantaban gol, remató incomprensiblemente fuera. No hay duda de que alguien le ha echado mal de ojo al Guaje. Si no, no se entiende su mala racha ante el marco rival. El asturiano siempre fue goleador. Vive una pesadilla, lo contrario de un Alexis al que le han dicho que se queda y está muy motivado.

El partido también sirvió para ver a un Cesc Fàbregas que jugó con libertad, como le gusta, apareciendo por cualquier sitio. El del Maresme es un futbolista al que le van los partidos con el Espanyol, que vive la rivalidad, desde que era niño, que los siente de una forma especial. En esa segunda mitad fue uno de los que más participaron en el juego ofensivo del Barça que, con todo, no fue nada del otro mundo.

El Espanyol dio señales de vida en un remate aislado de Fortín que conjuró Valdés. Era el primer disparo blanquiazul entre los tres palos de los de Aguirre.

Cambio de Villa

El Guaje pudo marcar en un buen remate, tras centro de Alves, pero Cristian Álvarez lo evitó. Vilanova ya no aguantó más y le cambió por Pedro. Otro golpe moral para el Guaje que va a cambiar de aires la próxima temporada. Ahora le queda la Roja, la Copa Confederaciones en Brasil para la que Vicente del Bosque debe convocarle. Será su oportunidad de borrar una temporada infausta que el asturiano no merece.

El partido, encima, tuvo un epílogo innecesario de Wakaso. No pudo reprimir su carácter volcánico y casi se comió al árbitro Fernández Borbalán. Protestando una clara falta de Capdevila a Alexis. Al ghanés se le cruzaron, otra vez, los cables y fue expulsado. Wakaso llevaba ya 17 tarjetas amarillas en la temporada y eso que estuvo ausente un tiempo por jugar la Copa de África.

Justo antes, Piqué había salvado una ocasión de gol de Sergio García tras centro de Verdú. Lo curioso es que la oportunidad nace de un tiro de Alves hacia su propia puerta.

Y el partido ya quedó visto para sentencia con un jugadón entre Pedro y Xavi que el tinerfeño convirtió en un nuevo gol para su cuenta personal. Pedro se la dio al crack de Terrassa, quien le devolvió un balón de oro que controló el tinerfeño con el muslo y remató con acierto. Era el 0-2 que dejaba clara la superioridad barcelonista. Con las ocasiones que creó, el resultado quedó corto y todo.

El derbi acabó casi con un amago de tangana entre Forlín y Cesc que Fernández Borbalán acabó con una tarjeta amarilla para cada uno. Fue una acción típica de un derbi que recordó a todos que se estaba disputando un Espanyol-Barça.

Ver como los aficionados espanyolistas abandonaron el campo antes del final. El Barça se queda a tres puntos de lograr los 100 puntos. Es el último reto de la temporada.

Crónica publicada por Francesc Aguilar, MD.com 

Los goles:

























Fuente fotos: www.mundodeportivo.com, www.laopiniondemalaga.es y www.marca.com
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Lunes, 27 de Mayo de 2013




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