Villarreal 2 - Barça 2 (20-03-2016)


2-2: Más cerca del título

El Barça logró un valioso punto que le permite ampliar la ventaja respecto al segundo y aproximarse más a la Liga

El Barça no acabó de aprovechar la derrota del Atlético en Gijón para dar un golpe definitivo a la Liga al empatar a dos en Villarreal un partido que se le había puesto muy de cara con el 0-2 al descanso. La salida de Piqué del campo debilitó en exceso la zaga culé y el submarino amarillo igualó el choque en seis minutos. El empate pudo saber a poco por cómo se había puesto el choque para los culés, pero arañar un punto más a los rojiblancos en lo alto de la tabla, empatar en un campo donde han perdido Madrid, Atlético y Sevilla, y de paso mantener la racha de partidos invicto -que asciende ya a 39- no es mala conquista, ni mucho menos. Hoy es más líder.

Aunque el encuentro era a la hora de la siesta no dio tiempo ni a echar una cabezada. En el minuto uno de partido, en la primera llegada del Villarreal, los locales estuvieron a punto de adelantarse en el marcador con una buena jugada por la banda izquierda de Bakambu, que sentó a Piqué con un quiebro y la colgó en el área. Entre Alba, Arda y Trigueros mandaron el balón al poste y Bravo atajó el esférico y evitó así el golpe. Susto inicial y todos firmes. A partir de ahí el Villarreal fue ganando en control y tuvo el balón durante los primeros minutos de partido.

El tridente azulgrana estaba muy solo en punta y las transiciones culés terminaban en recuperación y posterior ocasión de peligro del submarino amarillo. La dudosa actuación del colegiado murciano Sánchez Martínez se empezó a fraguar con una amarilla por manos a Piqué que no era ya que el balón le había impactado en el pecho, y pocos minutos más tarde perdonándole una que sí era. Balance igualado para el central catalán. Entre estas dos acciones, el Barça abrió la lata. De nuevo el balón parado, aunque esta vez con más suspense. La botó Messi, como de costumbre, la bajó sin quererlo Luis Suárez, y Rakitic, muy atento, la cazó a la altura del punto de penalti para disparar fuerte y raso al fondo de las mallas. 

Estallido ambiental

El indulto a Piqué destapó la caja de los truenos y las primeras consecuencias se materializaron en amarilla para el capitán Bruno y expulsión del técnico Marcelino, ambos por protestar. El Madrigal no paró de rugir y protestarlo todo desde entonces y el punto álgido llegó con el penalti de Asenjo a Neymar. En la segunda caída del brasileño en el área -la primera tropezó con Víctor Ruiz- el colegiado señaló un penalti dudoso aunque de esos que por menos se pitan muchos. Los locales pusieron el grito en el cielo ante el colegiado, mientras que la polémica y el griterío de la afición local fueron inversamente proporcionales a los nervios de Neymar, que conectó un medio ‘Panenka’ para poner el 0-2 y enterrar -por el momento- la polémica de los penaltis fallados del Barça.

Se fue Piqué y llegó el empate

La segunda parte estaba controlada por el Barça y el Villarreal no encontraba la forma de materializar las instrucciones recibidas por su técnico al descanso, hasta que Luis Enrique movió el banquillo culé. En apenas dos minutos Piqué y Arda dejaron su lugar a Mathieu y Alves, y en un minuto marcó Bakambu. La llegada desde la segunda línea de Denis Suárez acabó con un disparo del gallego que Bravo despejó, pero el delantero le ganó la partida a un somnoliente Mathieu para reducir distancias. La pesadilla del central francés acababa de empezar y muy pronto se magnificaría, pero antes Neymar pudo transformar el 1-3 cuando Asenjo se sacó una mano milagrosa. Acto seguido, del posible tanto azulgrana se llegó a la igualada amarilla. El recién incorporado Mathieu empató el partido con un gol en propia puerta tras la salida de un córner. La explosión de El Madrigal con el tanto dejó en susurros las quejas con el penalti de Neymar en el primer tiempo.

Sin reacción

El Barça sacó pecho y orgullo tras el duro golpe y consiguió achicar el temporal ‘groguet’, recuperando el control del partido, pero sin ser capaz de asestar un nuevo golpe a los locales.

Primero fue Sergi Roberto con un tímido disparo lejano que se perdió fuera. Más tarde Ivan Rakitic remató de cabeza un córner pero se volvió a encontrar con la manopla de un inspiradísimo Asenjo. En los instantes finales, Dani Alves y Luis Suárez lo probaron a la desesperada pero sus disparos no alcanzaron los tres palos. El pitido del colegiado acabó con noventa minutos de pulsaciones por todo lo alto y el Barça cosechó un empate de aquellos que también valen Ligas. La ventaja respecto a sus perseguidores es amplia justo antes de que llegue el Clásico.

Crónica publicada por Ángel Pérez, MD.com




































Fuente fotos: www.mundodeportivo.com, www.laopiniondemalaga.es y www.marca.com
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