Por fin, después de un clásico la caverna mediática además de toda la prensa mundial (estos ya lo hacían) reconoce la superioridad del Pepteam, que sin hacer el partido más completo, pues se cometieron errores infantiles, ha dejado más que claro que hoy por hoy el equipo de Llouriño no está ni de lejos a su altura.
El partido de ayer no fue uno más, era el clásico más esperado por la afición blanca, el de la esperada revancha, el del fin de ciclo etc., etc.…. pero la realidad es que fue el que demostró que a este Barça aún le queda mucha gasolina y que a poco que tenga una pizca de suerte sobre todo con las lesiones, volverá a levantar títulos y quién sabe si será por fin el equipo que gane dos Champions seguidas.
Centrándonos en lo meramente deportivo lo de ayer fue una verdadera lección de Pep y Tito a su “amigo” Mou que probablemente esté a estas horas visionando el partido a ver si es capaz de encontrar a Messi, que tal y como adelanté en la previa jugó “escondido” todo el partido desquiciando a la defensa blanca que en ningún momento supo cómo frenarlo. Tal vez la mayor diferencia que existe entre estos equipos es que el Barça tiene a los mejores jugadores del mundo con la mejor pareja de entrenadores posible y el Moudrid es un equipo con grandísimas individualidades pero con un entrenador mediocre, que en ningún momento ha sabido estar a la altura de las circunstancias.
Comenzó el Barça jugando con un 4-4-2 (como anticipé en la previa) que por momentos se convertía en un 3-4-3 con Alves de comodín, haciendo de extremo cuando teníamos la posesión y de lateral cuando tocaba defender. El partido no se pudo poner más feo para el Barça cuando en la primera jugada del partido Valdés comete un error infantil y envía el balón hacia la posición de Di María que se encontraba libre de marca y tras una serie de rebotes y un fallo garrafal de Piqué que no sale al fuera de juego, el balón llega a Benzema que hace el 1-0 a los 27 segundos. Increíble pero el Barça había regalado un gol al “todopoderoso” e invicto en casa R. Moudrid, pareció que esta vez si la victoria blanca en el clásico no sería solo antes de jugar sino también después, pero nada más lejos de la realidad; este Barça es tan buen equipo que es capaz no solo de reaccionar ante tan difícil situación, sino que además tomó el mando del partido y siguió jugando el balón con los pies desde atrás sin temor a un nuevo error. Esto es el Barça, calidad y confianza en el equipo.
No llegáramos a los diez minutos cuando Messi hizo lucirse al que sin duda fue el mejor de los blancos “San Iker” que con la punta de los dedos despejo un balón que olía a empate. Fue sin duda el principio de un dominio abrumador, eso sí, teñido por alguna que otra ocasión madridista siempre aprovechando un error de los culés (que fueron bastantes a lo largo del partido). Bien es cierto que si el Moudrid no te hace ocasiones jugando en su casa y siendo el líder de la liga apaga y vámonos.
El dominio blaugrana continuó y a pesar de las “patadas” de los blancos poco a poco acechaban la meta de un Casillas que nada pudo hacer cuando Alexis lo batió de tiro raso y cruzado tras asistencia de Messi después de regatear a todo el que le salió al paso. Con empate en el marcador y el Moudrid noqueado se llegó al descanso y eso que había jugadores azulgranas que todavía no habían entrado del todo en el partido como eran Cesc, Iniesta y Alves, eso si, el Barcelona recuperó en este partido la mejor versión de Busquets que estuvo soberbio tanto en la contención como en la salida de balón los 90 minutos.
La segunda parte comenzó con un falso asedio blanco sacando hasta dos faltas al borde del área en los primeros cinco minutos pero solo fue un espejismo ya que así que los azulgranas cogieron el balón se hicieron con el mando absoluto del encuentro y a pesar de que el equipo blanco llegaba esporádicamente al área culé, siempre aprovechándose de errores puntuales de los de Pep, el partido solo tenía un sentido y era el que marcaba un Andrés Iniesta que hizo una segunda parte pletórica.
El segundo gol del Barça se esperaba antes o después y fue Xavi desde la frontal y con la ayuda de Marcelo el que batió a un Casillas que veía como su “amigo” remontaba el partido y le honraba con un record nada agradable, ya que “San Iker” se convertía en el portero con más goles encajados en los clásicos. Poco después y casi sin querer el Moudrid tiene una gran ocasión para hacer el 2-2 pero Cr7 envía el balón muy lejos de la portería defendida por Valdés.
Don Andrés seguía haciendo de las suyas y Messi le acompañaba en todo momento así que entre los dos marcaban el ritmo de juego haciendo correr a los jugadores blancos hasta quedar exhaustos con lo que el tercero se veía cada vez más cerca. Una buena recuperación de Busquets que jugó con Iniesta para que este enviara el balón a Messi, haciendo temblar a la defensa que se juntó tanto para frenar al argentino que Alves se quedó más solo que la una con mucho espacio para preparar un centro (muy bueno por cierto) al segundo palo que un Cesc hipermotivado remató en plancha para hacer un justo 1-3 que a la postre sería definitivo.
Pudo el Barça golear a su rival pero en ocasiones por suerte o por buscar a Messi para que hiciera el cuarto cuando no era la mejor opción el marcador no se movió. También el Madrid tuvo una buena ocasión para rebajar la ventaja pero Valdés con un poco de suerte envió el balón a córner.
El Barça ha sido mejor y por lo tanto justísimo vencedor de un clásico que sirve para demostrar que este equipo no tiene igual y que su entrenador es un ganador nato, capaz de retar al mismísimo líder de la liga con una defensa de tres en su campo.
Nota: El Madrid volvió a usar entradas duras y a destiempo para tratar de frenar a los jugadores culés, con dos nombres propios Pepe (como de costumbre) y un Sergio Ramos que algún que otro periodista de la capital oso compararlo con el capitán Puyol. Sin comentarios.
¡¡¡¡¡¡VISCA EL BARÇA Y VISCA PEP Y SU PEPTEAM!!!!!!!!
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