Athletic Bilbao 2 - Barça 2 (6-11-2011)

2-2: Messi salva un punto 'in extremis' para el Barça ante el Athletic

El primer gol del argentino en San Mamés da un punto de oro al Barça y cierra un auténtico partidazo

Pep Guardiola habla maravillas del rival muchas veces antes de los partidos, pero muy pocas se atreve a pronosticar un partido fantástico. El sábado lo hizo y acertó. Fue un encuentro fantástico, diferente a los que suele disputar el Barça, con dos protagonistas. Porque el Barça siempre lo es pero ayer su rival, el Athletic, también lo fue. Bielsa se mantuvo fiel a su ideario, auténtico y valiente, y con un equipo jovencísimo trató de tú al mejor equipo del mundo y a punto estuvo de derrotarlo, pero el número uno, Leo Messi, su vecino de Rosario, se lo impidió en el último suspiro.

Bielsa y Guardiola, aunque con matices distintos, dispusieron el mismo dibujo, el 4-3-3 que les acompaña casi siempre. El argentino retrasó a Javi Martínez de central para mejorar la salida de balón y cambió de ala a Muniain para que se centrara en atacar a Abidal y no en defender a Alves. Pep situó a Piqué con Mascherano para frenar a Llorente, alineó su tridente innegociable en la media para las grandes citas ('Busi', Xavi e Iniesta) y colocó a Adriano de extremo zurdo en detrimento de Villa, con Messi por la derecha y Cesc de falso '9'. Precisamente fue Adriano quien firmó la primera gran acción, un disparo desde el punto de penalti, tras una doble pared con Xavi, que casi se traga Gorka.

Los compases iniciales fueron rojiblancos. Con De Marcos y Ander Herrera persiguiendo a Iniesta y Xavi, al Barça le costó encadenar cuatro pases y el Athletic lanzó contras envenenadas. A los catorce minutos, Muniain, Llorente, Susaeta y Herrera conectaron con brillantez, pero Valdés blocó el colocado disparo del ex zaragocista. En el segundo intento, Herrera no perdonó. Susaeta aprovechó un resbalón de Mascherano para ganar la línea de fondo y dar el pase de la muerte a Herrera, que envió una rosca imparable a la izquierda de Valdés, que dejó su récord de imbatibilidad en 896 minutos.

El partido era del Athletic, pero el Barça no tardó ni un minutoen reaccionar. Busquets, en posición de extremo derecho, forzó una falta de Herrera, y cuando los locales esperaban un centro al área, Messi, en jugada ensayada, mandó el balón hacia atrás y Alves chutó a los pies de un Gorka muy atento. La siguiente aproximación sí dio sus frutos. Abidal, que a principios de año anotó su primer y único gol como azulgrana en San Mamés, se sacó un potente y medido centro al segundo palo que Cesc, con un prodigioso salto y un certero cabezazo, convirtió en el 1-1.

Los goles aumentaron la intensidad y las ocasiones se sucedieron. Primero Messi, con un disparo colocado que rozó el palo, e Iniesta, con un remate tras combinación con Leo que desvió de nuevo Gorka, pudieron adelantar al Barça. El Athletic tuvo sus opciones con una combinación de los dos pequeños, Herrera y Muniain, que acabó con un chut de Iker frenado por la lluvia, y un posible penalti de Adriano,que agarró por la camiseta a Iraola dentro del área.

Tras el descanso, la incesante lluvia caída sobre Bilbao empeoró el encuentro en calidad, porque costó jugar por abajo, pero no en chispa. El Athletic se mostró más cómodo, pero las ocasiones fueron del Barça. Iniesta trató de sorprender a Gorka, pero su vaselina se quedó corta, y Messi y Adriano también dispararon con intención. Los de Bielsa tiraron de contras y balones aéreos, que al final pudieron ser determinantes, ya que en un córner, regalado por Mascherano, llegó el 2-1. Abidal despejó en corto, el balón rebotó sin querer en Llorente y acabó desviado hacia su propia portería por Piqué. Mala suerte por partida triple.

Guardiola, que ya había dado entrada a Alexis y Villa, sustituyó a Gerard por Thiago y el Barça encerró a su rival, pero topó de nuevo con Gorka. Y cuando el Athletic, que acabó con diez por expulsión de Amorebieta, soñaba con un triunfo histórico, apareció Messi. Leo, siempre Leo, aprovechó una indecisión local para firmar el empate con sangre fría, con el interior del pie, y dar al Barça un punto merecidísimo ante un gran rival y en un choque fantástico. Un punto, no obstante, que deja a los azulgrana a tres del Madrid y que les obliga a otro partidazo, en un mes, en el Bernabéu.

Crónica publicada por Oriol Domènech, MD.es




























Fuente fotos: www.laopiniondemalaga.es y www.elmundodeportivo.es
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