Injusto, injustísimo es que al Barça le den sólo tres puntos por ganar los partidos como los gana. Dando clases de un fútbol que ningún otro equipo del mundo está capacitado para realizar, dominando los tiempos del partido a su antojo, presionando al rival hasta asfixiarlo y hacer que tire la toalla en la mitad del partido, haciendo que la posesión sea un monólogo y que los defensas rivales no lleguen a tiempo ni para dar patadas. Todo esto y mucho más hace el Barça en cada partido, y lo mejor de todo es que lo hace con tanta facilidad que hasta parece sencillo (mientras tanto otros juegan al perro y al gato).
Lo de ayer no es “más que otra victoria” de este majestuoso Barça , que aprovechando que llega la Navidad nos regala 26 goles a favor y cero en contra en los 6 últimos partidos (y uno de ellos fue el clásico, si aquel de la derrota fácil de digerir), y lo mejor de todo es que en este equipo los goles (algunos impresionantes) no son lo más llamativo, sino que lo es, ver jugar a este equipo, a esta orquesta de jugadores dirigidos por el maestro Pep, que partido tras partido y sin importar cual sea el rival nos deleita con una nueva sinfonía.
Por favor, no quiero despertar de este sueño en el cual hasta los más fervientes seguidores del equipo de la capital tienen que decir por qué no puede ser de otra manera que el Barça juega a otro fútbol, a un fútbol estratosférico al que su galaxia no podrá llegar. Los Barcelonistas somos románticos del fútbol y por este motivo tenemos que estar más que orgullosos de este equipo pase lo que pase a final de temporada.
El partido de ayer fue otra gran exhibición de buen fútbol que comenzó con una Real bien plantada en el campo y presionando la salida de balón del Barça, pero el equipo de Pep estaba enchufado, sabedor de la importancia del partido y eso propició que después de algunos intentos fallidos como un tiro de Villa desde fuera del área, llegara ,y tras una grandísima jugada de ataque, el primer gol de la noche, obra del Guaje tras una buena asistencia del hijo del gasolinero. Continuó el Barça con su tiki-taka particular para poco a poco cercar la portería rival y así llegar al segundo de la noche esta vez de un gran Iniesta, de nuevo con asistencia de D. Pedro (el mejor de la noche). Con dominio total y absoluto, recitando poesías con el balón se llegó al descanso.
La segunda parte no podía empezar peor para la Real, que veía como Messi y Alves hacían una obra de arte y con tres paredes llegaban al área de Bravo para que el Mesías hiciera el tercero. Lo mejor estaba por llegar y por supuesto tenía que hacerlo el mejor, que no es otro que Messi; él solito cruzó el área rival regateando a todo aquel defensa que intentaba ponerse en su camino (cuatro en total) para marcar uno de los mejores goles que se han visto en un campo de fútbol. La superioridad era tal que la Real estaba deseando que se terminara el partido, pero Bojan que había entrado en el campo por el ovacionado D. Pedro (repito, el mejor del partido) quiso unirse a la fiesta y hacer el quinto y último de la noche.
Nota: Es justo destacar a algunos jugadores que están superándose día a día, como es el caso de Mascherano, D. Andrés, D. Pedro, Messi y el incombustible Puyol.
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