Flirteó el Barcelona con el desastre total, con pitos incluso en Montjuïc en el primer tiempo, en el partido en el que tenía que reaccionar sí o sí después del fiasco de Hamburgo. Una primera parte demencial casi permite al modesto Alavés dar la campanada. Marcó Samu, pudo haber ampliado la ventaja y el Barcelona tuvo que remar para remontar en la segunda parte, con dos goles de Lewandowski, el segundo de penalti cometido sobre Ferran. Y aún tuvo que pasar algún mal rato porque volvió a relajarse con el marcador a favor.
Otra vez el equipo azulgrana regaló una primera parte. Un primer tiempo demencial en el que el Alavés podría haber dejado el partido casi sentenciado, con hasta cuatro ocasiones muy claras de las que solamente aprovechó la primera. El conjunto de Xavi necesitaba una reacción, pero tardó en ponerla en práctica. Hasta el segundo tiempo no se vio la diferencia
Rotó Xavi a varios jugadores respecto al esperpento de Hamburgo. Así, Romeu se quedó en la caseta, Gündogan jugó de mediocentro y Pedri regrreó al once titular. Lo más llamativo fue la titularidad de Cancelo como (teórico) lateral izquierdo, quedando Balde en el banquillo, señalado pese a que ante el Shakhtar ya no había sido titular. Lamine Yamal fue titular. Balde entró en el tramo final.
Antes, mucho antes, de que se cumpliese el primer minuto de juego, el Alavés ya mandaba en el marcador. Como en el partido de Granada. Imperdonable. Marcó el joven delantero Samu, que después del primer gol habría podido marcar otros tres. Pero salir con esa tibieza al campo viniendo de la semana de la que viene el equipo… ¡uf!
Guridi fue quien quitó el balón a Gündogan en la jugada del 0-1. Abrió a la izquierda, para la subida de Javi López, que centró para que Samu marcase de primeras. El gol obligaba al Barcelona a reaccionar, pero el que estuvo cerca del gol continuó siendo el sorprendente Alavés.
Una nueva ocasión llegó antes del minuto 10 tras internada y centro de Gorosabel, esta vez por la derecha, con Remate de Samu a la red por el extterior. Un gol desda la izquierda, una ocasión por la derecha y aún tenúan que llegar dos ocasiones, clarísimas, por el centro. En una se fue por el centro tras deshacerse de Cancelo, en una posición extrañísima por dentro, encarar a Ter Stegen y fallar por muy poco. La cuarta ocasión de Samu condenó a Koundé, al que ganó un balón dividido, después de una pérdida de Pedri, y superó en carrera antes der tirar al larguero.
Inmediatamente, Xavi ordenó a Koundé pasar al lateral y situó a Araujo a vigilar a Samu, que en media hora había tenido cuatro ocasiones clarísimas de gol, de las que había aprovechado una y desperdiciado tres… sin que Ter Stegen mediase.
Racaneó el juego de ataque el Barcelona en el primer tiempo. Hubo intentos de Joao Felix con más voluntad que otra cosa, hasta que llegó un balón filtrado por Gündogan a Lewandowski, que puso a prueba al meta en la única ocasión del Barça del primer tiempo, junto con intentos, de Joao Félix y Fermín.
Intensificó esa presión, casi nula, en el primer tiempo, el Barcelona en el segundo, empujando al Alavés a su área desde el primer minuto. Cancelo, muy desdibujado en el primer tiempo situado como centrocampista, se situó abierto en el carril izquierdo y nada más empezar el segundo acto probó al meta con un chut de lejos. Por la derecha, Lamine aceleró y tuvo el apoyo de Koundé, que fue el autor del centro que Lewandowski remató para empatar.
Se volcó el Barcelona sobre el área del Alavés en los últimos veine minutos. Un gran pase, uno más, de Iñigo al recién incorporado Ferran derivó en la entrada de Abqar, que llegó tarde al balón y cometió un penalti muy claro. El árbitro debutante, muy a su pesar, no tuvo más remedio que señalarlo y Lewandowski no perdonó pese a ese molesto y extraño saltito/pase de baile con el que busca engañar al portero. Hasta el final, apuros en los cinco minutos de añadido ante un Alavés aplicadito. Montjuïc pidiendo la hora.
Crónica publicada por Joan Poquí, MD.com
Fuente fotos: www.mundodeportivo.com y www.laopiniondemalaga.es
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