Neymar, el mayor espectáculo del mundo
El brasileño supo abrir la muralla del Villarreal con su gol, su juego, sus ganas y liderazgo, confirmando que ha dado un salto cualitativo que le coloca entre los más grandes. Encima logró otro tanto que lo hubiera firmado el propio Pelé y le ‘regaló’ un penalti a Suárez para que su socio marcara también
El Barça sumó tres puntos muy importantes ante un complicado Villarreal. Fue su undécima victoria consecutiva. Llegará al Clásico arriba en la tabla, liderando la clasificación. La plantilla le prometió a Leo, cuando cayó lesionado frente a Las Palmas, que no se preocupara que iban a dejar al Barça arriba hasta que él volviera. Han cumplido su palabra con victorias, con goles, con más lesiones, con una voluntad de hierro, con una ambición de campeones. Si Lionel apura un poco más en su recuperación podrá jugar en el Bernabéu junto a sus compañeros que no han faltado a su palabra. Y entre ellos han destacado sus dos grandes amigos, Neymar y Luis Suárez que con sus goles y liderazgo han mantenido al Barça en el top. Junto a ellos Busquets e Iniesta han sido básicos. Pero, sobre todo, el equipo en conjunto al que Luis Enrique le ha devuelto su equilibrio defensivo y esa presión que es básica en su juego.
Ante el Villarreal, indudablemente, la victoria no fue fácil por el juego de los castellonenses, por el árbitro Clos Gómez, porque al Barça le cuesta convertir en goles las oportunidades que crea. En la segunda mitad, tras el gol de Neymar, con Busquets más entonado, con Iniesta enchufado y el equipo muy motivado, le dieron la vuelta a un encuentro importante. Ganaron y presionaron al Real Madrid que jugaba luego en Sevilla, justo antes del Clásico.
Mención aparte merece Neymar, que lidera con 11 goles el ‘Pichichi’, cifra a la que debe sumarse su peso específico en el equipo. Ya tiene un rol como Messi, de desatascar partidos complicados, de desequilibrar organizaciones defensivas tan ordenadas como el Villarreal. La ‘jaula’ que le puso a su alrededor Marcelino no sirvió para que Ney no pudiera volar. Tampoco las brusquedades (sobre todo un Bonera duro y provocativo). Neymar no dio un paso adelante tras la lesión de Messi como sucedió en la anterior ocasión con Tata martino. Ahora con Lucho ha dado varios pasos sin que nadie se lo pidiera. Hoy por hoy es mucho más que el heredero de Leo, es quien le va a ayudar a llevar la corona de rey al argentino, poniéndosela él, los días en que Lionel no esté.
Partido táctico
El Vilarreal salió con la idea clara de no encajar ningún gol. No en vano, desde el último ascenso, nunca le han ganado los ‘groguets’ al Barça, a pesar de jugar de forma notable habitualmente. Para eso Marcelino dispuso un ‘once’ con tres medios centros, metiendo ahí a Jonathan dos Santos, junto a Bruno y Pina. Eso dificultaba mucho al Barça las aproximaciones. Busi estaba menos fino que en los últimos partidos en el pase y todo el bagaje ofensivo quedaba reducido a Iniesta y Neymar que se buscaban sin cesar. Luego arriba Luis Suárez luchaba por cada balón y hasta era capaz de crear oportunidades. Con todo era un partido muy táctico, con Barça y Villarreal ejecutando muy bien y de forma ordenada la presión.
Marcelino quería separar la pequeña gran sociedad que han formado en los últimos partidos, apoyados por un Busquets e Iniesta que jugaban cerca de ellos. La línea de cinco centrocampistas ‘groguets’ se encargaron de romper esas alianzas de los jugadores del Barça. Si a eso se suma que les costaba llegar por las bandas (muy protegidas también por Samu Castillejo y Dennis Suárez) , queda claro que el Villarreal no tuvo la posesión del balón, que fue del Barça, pero controló el partido que es lo que quería.
No hubieron muchas oportunidades de gol. Y eso en el fútbol se paga. Quedaba claro que quien acertara en el remate tendría mucho de ganado. Cada equipo tuvo una clara oportunidad de gol. Los azulgrana por medio de Mathieu en un veloz contrataque, cuyo remate salvó con los pies Oriola (26’). Los castellonense, por medio de Samu Castillejo que también chutó igual que el frabncés del Barça, a romper, y Bravo pudo despejar el peligro (44’). El empate a cero del descanso fue justo. Eso sí, el Barça pudo marcar en otras ocasiones como en una gran jugada de Neymar que Oriola despejó junto al poste o en un excelente ase de Iniesta al que Munir no llegó por poco. Pero fue poco bagaje ofensivo el del Barça.
El ‘show’ de Clos
La primera parte estuvo ‘animada’ por el viejo conocido de Pep Guardiola, por el árbitro Clos Gómez,que en todas las jugadas ‘divididas’ dejó seguir a los castellonenses sin sancionar falta. Como sería la cosa que Andrés Iniesta, el capitán, vio tarjeta amarilla por...¡protestar! El colegiado les llegó a descontrolar a los jugadores de Luis Enrique con sus arbitrarias decisiones. Eso sí, Clos no le permitió a Neymar lucir su banda elástica en la cabeza como en el último partido.
Claro que todavía fue peor en el inicio de la segunda mitad. Primero Bonera ‘cazó’ a Neymar sin que Clos señalara nada. Tras la protesta de sus compañeros, el árbitro mostró tarjeta amarilla a Suárez y a Neymar. ¡Increíble! Al menos esas injustas decisiones arbitrales despertaron al público que no llenaba el Camp Nou (74.109 espectadores) y motivó a los jugadores azulgrana.
El Barça mereció marcar en un excelente centro con el exterior de Neymar al que Munir no llegó con claridad en su remate de cabeza. El balón fue para Alves que remató con fuerza pero al ‘muñeco’. Oreola hizo otra excelente intervención. Igual de clara fue una oportunidad de Suárez, sólo, cuyo cabezazo fue fuera.
‘Golazos’ de Neymar
Ya lo dijo Cristiano Ronaldo que tras Messi y él llegaba Neymar. No se equivocó. Lo que el portugués no sabe es lo cerca que está de él. Neymar ha madurado en su juego de una forma espectacular, ha tomado responsabilidades. El Villarreal le colocó ayer hasta tres jugadores para marcarle y se salió de ellos. El ‘golaço’ que hizo fue el premio a su trabajo y a su clase. Aunque más de la mitad de la responsabilidad del tanto fue de su socio Busquets que robó el balón y le dio una asistencia de lujo. Busi, el gran olvidado de los premios individuales, confirmó una vez más su categoría. El 1-0 fue decisivo. Ney sumaba su décimo gol en Liga.
De paso obligó a Marcelino a cambiar sus planes. Sacó a un medio centro, Pina, para poner al velocísimo y joven Bakambu. Ganó ofensivamente, pero le dejó más espacio al Barça.
Y el equipo de Luis Enrique lo aprovechó. Fue en otra jugada de Munir, ante el Villarreal muy trabajador y entonado. Costa le derribó dentro del área. Y Neymar, dando muestras de su grandeza como jugador, le cedió el balón a su colega Luis Suárez para que marcara desde los 11 metros en el casi definitivo 2-0. Entre los dos han firmado los últimos 17 goles del Barça. Una animalada.
Pero aún le quedaba lo mejor por mostrar. Su segundo tanto lo hubiera firmado el propio Pelé. de hecho, si lo recuerdan, fue parecido al que hizo ‘O rei’ con Brasil en el mundial de Suecia 1958 con un ‘sombrero’ a su marcador, antes de rematar el 3-0. Ahí le devolvió el favor del 2-0 Suárez porque Luis le dio un pase de gol de gran categoría. Y el ‘sombrero’ a Costa aún es más difícil porque se lo hizo de espalda. El sensacional gol también recordóa uno que hizo Ronaldinho en el Sadar frente a Osasuna.
Y la pequeña gran sociedad que forma Neymar con Suárez casi logra el 4-0. El remate del uruguayo se fue fuera por poco. ¡Qué grandes son los dos amigos y ‘killers’!
Este Barça llega al Clásico con la cabeza muy alta, ni las lesiones han podido con ellos, ni las sanciones de la FIFA y UEFA, nada. Lo mínimo que se merece este equipo es ponerse en pie y aplaudir hasta que las manos hagan daño.
Crónica publicada por Francesc Aguilar, MD.com
Fuente fotos: www.mundodeportivo.com y www.laopiniondemalaga.es
.
No hay comentarios:
Publicar un comentario